Día de LAS madres: Celebrando los diferentes tipos de maternidad

El Día de la Madre no es solo una oportunidad para celebrar a quienes nos dieron la vida, sino también para visibilizar a los distintos tipos de maternidad actualmente.

Día de LAS madres: Celebrando los diferentes tipos de maternidad

La maternidad, hace mucho, dejó de ser una sola. De hecho, nunca lo fue. Era más que nada la visión que los demás tenían sobre ella, los estereotipos que constituían su concepto, a tal punto de que la maternidad solo se veía de una forma en específico. Pero eso cambió. Hoy más que nunca, somos conscientes de los diferentes significados que hay sobre ser mujer y ser mamá. Y qué otro día para hablar de los distintos tipos de maternidad, que en el Día de la Madre, o mejor dicho, Día de LAS Madres. 

¿Cuáles son los distintos tipos de maternidad actualmente?

Viendo más allá de la histórica creencia de que madre es la que engendra y que la vida de una mujer se realiza una vez que se vuelve mamá, en este artículo haremos un recorrido por los distintos tipos de maternidad que podemos encontrar en el siglo XVI. 

En especial, porque es en el Día de la Madre cuando siempre se celebra un solo tipo de maternidad. Hoy en día, sabemos que hay muchas cosas alrededor de ella. Podemos crecer y expandir su significado y sobre todo, podemos ver cómo se entrelaza con lo que somos todos los días. 

Madre normativa: Suele ser la más común y la más aceptada en la sociedad, ya que es parte de una familia constituida por mamá y papá. 

Pero no por eso es la más sencilla. 

En muchos casos, a pesar de tener una pareja, estas madres no cuentan con su apoyo, encargándose por sí solas de todo el hogar y, al mismo tiempo, de sostener su matrimonio. Además, entre todos los tipos de maternidad, parece que la sociedad no parece aceptar fallas especialmente en esta. Puede que sea porque, al ser la más común, todos creen tener derecho a opinar sobre cómo deberían hacerse las cosas.

Madre no-normativa: Hablamos de mujeres que escapan de un punto de vista conservador. Mujeres que deciden formar una familia homoparental, o que en todo caso, aun si tienen una pareja del sexo opuesto, deciden hacer una fertilización in vitro u optan por la maternidad subrogada. 

En estos casos, muchas mujeres, si bien sí son consideradas como madres, pasan por los juicios de otras personas que no entienden su decisión, y que minimizan su experiencia materna por no haber sido ellas las que, en muchos casos, llevaron un embarazo tradicional con todo lo que conlleva. 

Lo principal es entender que una madre es una persona capaz de decidir, y que no necesita de ser normativa para ser excelente.

Madre soltera: Los motivos pueden ser distintos, pero el fondo es el mismo: una mujer decidiendo hacerse cargo de su maternidad por sí sola. A diferencia de los otros tipos de madres que escapan de lo normativo, las madres solteras parecen ser las más aceptadas por la sociedad, aunque en la mayoría de los casos, esto se da únicamente porque las personas piensan que ha sido abandonada o que no son capaces de encontrar una pareja. 

Pero no es así. 

Distintas mujeres que viven este tipo de maternidad han confesado que, si bien por una parte hay una sensación de amor incondicional, también es lo más doloroso y difícil que han vivido. Sobre todo, por las distintas preocupaciones y contratiempos que tienen que resolver por su cuenta. 

Madre que adopta: Ser madre es una decisión que requiere de autoconocimiento y responsabilidad. Por eso, este tipo de madres son mujeres que optan por embarcarse en la gran aventura de la maternidad, y asumir el desafío de cuidar la vida de otra persona nacida en otra familia. Esto supone ya un comienzo bastante distinto a la maternidad biológica.

Es ese el motivo por el que para ser una madre adoptiva, también se requiere de una serie de habilidades diferentes para poder generar un vínculo con su hijo, al menos hasta que se sienta parte de la familia. 

Pero a pesar de todo eso, y de lo noble que es la decisión, la sociedad sigue viendo con ojos huraños a las mujeres que adoptan.

Madre no madre:  Hace años, e incluso en estos tiempos, una mujer que decidía no tener hijos era juzgada por la sociedad. Irónicamente, por parte de otras mujeres que aún mantienen la creencia de que ser mamá es la última realización de una mujer. 

Pero hoy en día, son más las mujeres que optan por no ser mamás. Las razones son distintas, y todas son válidas. Sin embargo, no por eso dejan de ser maternales. 

Desde tías, madrinas, hermanas, e incluso hasta mejores amigas. Muchas veces hacemos el papel de madre, de cuidadora, así como otras mujeres lo han hecho con nosotras, demostrando así, que no es necesario dar la vida para maternar.

En conclusión, debemos recordar la importancia de redefinir la maternidad, ya que es otra manera de liberarnos en esencia como mujeres. Además, porque así también se le da el espacio para que surjan nuevas definiciones. De ahí su relevancia por hablar y cuestionar, sobre todo, las figuras maternas que nos podemos encontrar en el camino para poder celebrar todos los tipos de maternidad que existen. 

Todas son admirables a su propio modo. Después de todo, ¿cuántos momentos importantes de nuestras vidas estuvieron marcados por mujeres que nos dieron amor, un abrazo maternal (consejos de nuestras tías o consuelos de nuestras mejores amigas, por ejemplo), rumbo a las decisiones que tomamos, y que no se limitaban solo a nuestras madres?

Por eso, en este día especial no queremos celebrar el Día de la Madre; queremos celebrar el Día de LAS Madres.